miércoles, 21 de octubre de 2009

Definitivamente se acabo el verano, en el, el anhelo de un romántico y placentero amor vacacional se ha ido sin consumarse, quizá para unos, para otros no, pero puedo dar por clausurada la emotiva época de fiesta que trajo sus bochornosos aires. Talvez escribir poemas de amor mas decentes ayudaría o dejarme de boberías, pero ¿para que sirve la literatura?, para adorno y vanidad de la personalidad o solo es un inútil ocio de sofisticados caballeros y elegantes damas de zona residencial, amantes de lo bello y lo formal, del estilo y el ingenio, será que los lectores piensan, gozan y viven mucho mas con la imaginación que con la razón, que consiguen no ver este mundo del cual solo el dinero habla y las posiciones sociales se compran y se venden sin escrúpulos, en este mundo en el que los románticos de nublados ojos con palabras conjugadas de rara belleza consiguen sus objetivos y los demás como yo solo logramos ver el antagónico paisaje llevando la pesadumbre de las malas acciones y sus consecuencias, pues eso parece, y bueno, cierto es que eh perdido la capacidad de amar, tal vez la gente la pierde del diario y se entrega con frenesí a los tratos carnales con desconocidos, pero claro, siempre esta la posibilidad del verdadero amor, pero así también existe la posibilidad de no encontrarlo y tropezar con el predicamento que intriga y lo estropea todo, pero, la idea no es mala, en estos tiempos a quien se le ocurre enamorarse, claro, pensaría de otra forma si estuviera del otro lado del río, pero la naturaleza y su equilibrio engendra seres obscuros e incomprendidos, villanos empeñados a tirar con escopetas a las alas de los poetas, de los novelistas, de los economistas y de los enamorados, villanos artos de ellos mismos, villanos que no pueden ver la felicidad sin sentir pesar y villanos que notan como la moral se contrapone a cada momento, esos que también generan letras mal vistas, de hechos poco éticos, es decir, un degenerado pensador pesimista, naturalmente desdichado e infeliz, que obtiene su encanto en lo subversivo, y así es, los antagónicos también sufren de la vanidad y su ingenio, de lo grato que es la belleza y sufren del gusto por las letras así como de las buenas costumbres, por eso uno nunca sabe en que bando esta hasta cuando mira por encima del hombro y observa a los ojos de su compañero.

3 comentarios:

Solano dijo...

Tienes razon mi estimado Neto, hay muchos que añoran el verano por esos amores que viven como en una pelicula, pero muchos nos quedamos viendo simplemente como pasa el tiempo y como es que a veces la vida no es tan justa para todos...tal vez los primeros a veces no se dan cuenta de la realidad que es la existencia por que el amor les ha nublado la viste como para apreciarlo. Muy buena rolita.
Nos estamos leyendo.

Unknown dijo...

Como si en un espejo se reconocieran los defectos. o algo así

Marisol dijo...

Se acabo el verano pero pronto llegara el invierno mi estación del año favorita jajaj claro con sus pros y contras por que es cuando se denota más esto que dices es la estación en la que el amor esta reflejado en las superficialidad de esta sociedad que conformamos y de la que bien o mal no podemos desligarnos... también me he preguntado hoy en día para que sirve la literatura... y creo que para tipos como nosotros o como yo la imaginación me proporciona más gozo... saludos friolentos desde este lado jajja cuidese